Notas presentadas en el III Congreso de Historia de la Medicina Peruana – 2021

INTRODUCCIÓN

En las instituciones sanitarias y universitarias nacionales vinculadas con el cuidado de la salud colectiva continúa un sentimiento de reconocimiento al alto valor de los aportes pioneros que,  en el campo de la docencia y la práctica  epidemiológica  peruana, hicieron  los doctores  Hugo Pesce  Pescetto,  Carlos Gayoso Pantoja, Carlos Quiroz Salinas, Hugo Lumbreras Cruz, y Joaquín Roberto Cornejo Ubillús, médico epidemiólogo .  Por tal razón, no puede sorprender las distinciones y homenajes que estos personajes siguen recibiendo – ahora de manera póstuma – de parte de las autoridades de aquellas  instituciones.

Ese reconocimiento, se expresa nuevamente con ocasión del III Congreso de Historia de la Medicina Peruana, cuando las autoridades de la  “Sociedad de la Historia de la Medicina Peruana y Parques Conmemorativos”, programaron una conferencia sobre los aportes a la epidemiología y a la administración sanitaria del  Dr. Joaquín Cornejo Ubillús. Conferencia que se realizó el 29 de junio de 2021 y que estuvo encargada a los que escriben estas notas.  

NOTAS BIOGRÁFICAS

Joaquín Roberto Cornejo Ubillús, nació en la ciudad  de ciudad de Piura el año 1925.

Estudiante de medicina distinguido. Médico-cirujano. Epidemiólogo y funcionario del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) Profesor principal de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Director Superior (viceministro) del Ministerio de Salud (MINSA). Funcionario internacional en Salud Pública. Pensador heterodoxo.

Falleció en la ciudad de Lima el 19 de diciembre de 2017, a los 92 años de edad.

Como estudiante de medicina

Realizo sus estudios de formación profesional en la Facultad de Medicina de San Fernando, en tiempos políticos muy difíciles, dentro del marco normativo del Estatuto Universitario de 1946 (cogobierno del tercio estudiantil). Fue secretario de asistencia social del Centro de Estudiantes de Medicina; y, en su condición de delegado estudiantil fue miembro del Consejo de la Facultad: de Medicina y del Consejo Universitario de la UNMSM. Egresó de la Facultad con el grado de bachiller y el título de médico-cirujano el año 1952. Su tesis: Aporte al conocimiento de la leishmaniasis tegumentaria en el Perú obtuvo el “Premio Camino”, otorgado por la Asociación Médica Daniel A. Carrión, a la mejor tesis de medicina de ese mismo año.

Inicios de su carrera profesional 1953-1956

El año1953, Cornejo Ubillús ingresó, por concurso, al cargo de médico asistente de la División de Enfermedades Transmisibles del MSPAS, que tenía como Jefe al Dr. Enrique Villalobos Carranza, pionero de los servicios antimaláricos en el Perú. La División había iniciado sus actividades en el año 1951, organizándose en siete Departamentos, que cumplían funciones específicas: Epidemiología, Inmunizaciones, Lucha contra los Vectores, Peste, Lepra, Venereología y Sanidad Internacional. Por vez primera en el país – gracias a un Convenio con la OPS – los Jefes de Departamentos fueron profesionales de la salud con dedicación exclusiva a sus funciones.

Fue en ese Departamento de Epidemiología, dirigido por el sanitarista Carlos Quiroz Salinas, donde Cornejo inició su carrera profesional como médico asistente, aunque pronto fue ascendido a jefe de operaciones de campo. La función de dicho Departamento era evaluar los resultados de los programas de control de enfermedades transmisibles ejecutados por los servicios del MSPAS. Realizando, para tal evaluación, estudios epidemiológicos, bacteriológicos y entomológicos sobre la malaria, la peste, la distribución del triatoma infestat, los efectos de los insecticidas; así como el establecimiento del registro hospitalario de casos de enfermedades transmisibles.

Entre los años 1953 y 1956, el equipo de trabajo de Cornejo tenía como ámbito de acción los valles maláricos de la Costa peruana, prestando especial atención a la evaluación de los resultados de las campañas del Departamento de Lucha contra los vectores. Éste, a su vez, estaba encargado de las desinfestación de los valles del país para conseguir el control de las enfermedades transmitidas por insectos, especialmente la endemia malárica, mediante la aplicación el DDT y el hexacloruro de benceno. La actuación de Cornejo en aquellos valles se caracterizó por sus iniciativas para incrementar los alcances de la aplicación de las normas nacionales de evaluación establecidas por la División. Iniciativas que provocaron, en dos oportunidades, amonestaciones de sus superiores jerárquicos.

Como estudiante de posgrado

Las autoridades de la División de Enfermedades Transmisibles enviaron a Cornejo fuera del país en el año 1956 para que efectuara estudios de posgrado de Salud Pública y Administración de Salud, en la Universidad de Chile, así como en el Servicio de Infectología del Hospital Barrios Lucco de Santiago de Chile, donde permaneció hasta el año 1957.

Además, continuaría, durante el resto de su ejercicio profesional, su capacitación posgrado en los campos de la epidemiología, la administración y la planificación del desarrollo. Asistiendo como alumno o como invitado a las principales actividades académicas desarrolladas por el Instituto Peruano de Administración Pública (INAP), Centro de Altos Estudios Militares (CAEM), Escuela de Salud Pública del Perú, así como otras entidades de la Universidad Peruana.

Como funcionario del nivel central del MSPAS

Durante la ausencia de Cornejo Ubillús del país, por razones de su capacitación en Chile, la División de Enfermedades Transmisibles del MSPAS había sido desactivada, debido a la creación en el país del Servicio Nacional de Erradicación de la Malaria (SNEM), que ejecutaría el Plan Tripartito (Gobierno Peruano, OPS/OMS y UNICEF) pertinente. En la organización del SNEM – como Servicio Especial adscrito a la Dirección General de Salud – no había sido considerada los servicios de Cornejo.

En esas nuevas circunstancias, Cornejo fue asignado entre 1957 a 1969 a diversos cargos directivos o de asesoría en el nivel central del Ministerio. Cargos relacionados por lo general con la epidemiología y el control de las enfermedades transmisibles. Entre los principales de esos cargos mencionaremos los siguientes: Jefe del Departamento de Epidemiología de la Dirección de Servicios Técnico Normativos; Asesor Nacional de Epidemiología; Director de la Dirección General de Programas de Salud; Asesor de Epidemiología de la Dirección Superior.

En su calidad de funcionario del nivel central especializado en Epidemiología, Cornejo fue encargado durante la realización del primero y el tercer Congresos de la Sociedad Peruana de Salud Pública de la presentación de dos ponencias: Las enfermedades transmisibles (1962) y Estado actual de la epidemiología y del control de las enfermedades transmisibles en nuestro medio (1968). En esta última hacía el siguiente comentario:

“… se recomienda el inicio de estudios epidemiológicos en campos diferentes al de las enfermedades transmisibles y se destaca la importancia de la necesidad inmediata de una sustancial revisión de la legislación, reglamentación y organización de los servicios directamente comprometidos y se termina expresando la intensa inquietud y decisión por superar las deficiencias, pese a las limitación de todo orden” (J. Cornejo, 1968, p. 276-277).

El año 1969 Cornejo Ubillús renunció al MSPAS, en protesta de la reducción del nivel político-administrativo de la estructura encargada del desarrollo de los estudios epidemiológicos en el país. Reducción formalizada en la nueva Ley Orgánica del Sector Salud, dictada ese año por el autodenominado Gobierno Revolucionario de la Fuerza Armada.

Como funcionario internacional

Entre los años 1969 y 1975, Cornejo Ubillús cumplió funciones de consultor o asesor en temas epidemiológicos en diversos países el mundo, contratado por entidades de cooperación externa. Según el escribe en sus memorias, desempeñó tales funciones en los siguientes países: Venezuela, Uruguay, Bolivia, Brasil, España, Egipto, Sudán, El Congo y Trinidad-Tobago.

Como director superior del Ministerio de Salud: 1975-1977

Cornejo Ubillús regresó a la administración pública peruana a fines del año 1975 al aceptar la invitación de ocupar el cargo de Director Superior – análogo al cargo de Viceministro actual – del Ministerio de Salud, en el que permaneció hasta el final del año 1977. Apoyando, sucesivamente, la gestión de dos ministros de salud, los generales FAP Jorge Tamayo de la Flor y Humberto Campodónico Hoyos. Gestión en la que se destacan dos hechos en el ámbito sectorial nacional: la elaboración y la presentación del Informe Final de la Comisión del Proyecto de la Ley General de Salud 1975.-1977, así como la elaboración y la formalización de los primeros lineamientos de política de población en la historia del Perú.

La Comisión del Proyecto de la Ley General de Salud (CPLGS), fue establecida en el año 1975 con el objetivo de realizar “los estudios necesarios de la situación de salud del país y formular el Proyecto de Ley General de Salud que permita lograr una medicina socialmente orientada y al alcance de toda la población”. La Comisión presidida por el Dr. Mario León Ugarte, cumplió con el objetivo que se le había asignado, aunque consideraba dos propuestas de proyecto que, coincidiendo en los aspectos doctrinarios de la reforma en salud, disentían en los aspectos organizativos, económicos y financieros sectoriales. Las dos propuestas, contenidas en el Informe Final de la CPLGS, se sustentaron en febrero de 1977, ante el Consejo de Ministros. Cerca de dos años después de esas dos sustentaciones se aprobó – en un contexto antireformista – el Decreto Ley Nº 22365, del Sistema Nacional de Salud, que recogía solo parte de una de esa propuesta. Sin embargo, transcurridas más de cuatro décadas después de esos hechos, existe un actual consenso en considerar que en el Informe Final de la CPLGS se sentaron en el país los principios doctrinarios de una reforma en el sistema de cuidado de la salud basada de manera auténtica en el derecho de todos al bienestar, antes que a los requerimientos del mercado o los intereses particulares.

Por otro lado, desde inicios del año 1976, una Comisión Multisectorial, presidida por el Dr. René Cervantes Begazo, como representante del MINSA, y que tenía entre sus miembros al economicista y jesuita Juan Wicht, fue encargada de formular un proyecto de Lineamientos de política de población en el Perú. Proyecto que, finalmente, fue aprobado por Decreto Supremo Nº 00625-76-SA del 31 de agosto de 1976. Este dispositivo fue el primero de esta índole en ser aprobado en el país, aunque cuidándose en declarar que no se trataba de proponer un control de la natalidad, sino más bien de promover la paternidad responsable y fortalecer la unidad de la familia. Según especialistas en el tema, el contenido del documento llegó a plasmar un consenso sobre una situación realista de la situación demográfica y una declaración de principios inobjetables y que sirvieron para decantar las más recientes evidencias del problema demográfico y señalar vías de solución al mismo, después de casi una década de negativismo y rechazo.

Durante su gestión como director superior del MINSA, Cornejo apoyó decididamente al trabajo de esas dos comisiones, reforzó las políticas de desconcentración administrativa del MINSA, así como promovió un mayor acercamiento de los altos funcionarios del sector con los médicos jefes de los servicios hospitalarios de la capital. En su discurso político y administrativo insistía en no limitarse al conocimiento de las “problemática” sanitaría, sino al de tratar de encontrar la “solucionática” correspondiente; neologismo, este último, que pronto comenzó a ser utilizado en toda la administración pública. Asimismo, trataba de ampliar el concepto de la “epidemiología”, definiéndolo como “epidemiología de la vida y el amor”.

Asimismo, mediante la R.M 000748-76-SA/DS – obedeciendo a una iniciativa del mismo Cornejo – se estableció el 22 de septiembre como fecha de celebración anual del “Día del Epidemiólogo Peruano”, con el fin de reconocer oficialmente la importante labor que realizan estos especialistas de la salud en el control y prevención de enfermedades.

Como docente de la Universidad Peruana: 1953-1990

Inicio su práctica docente universitaria, de manera ad-honorem, en la Facultad de Medicina de San Fernando en el año 1953, Luego ocuparía, por concurso, los cargos de Jefe de Prácticas y de Profesor Auxiliar de la cátedra de Enfermedades Infecciosas, Tropicales y Parasitarias, dirigida sucesivamente hasta el año 1960 por los profesores principales Darío Gutiérrez Ruiz y Hugo Pesce Pescetto.

En 1961, después del cisma sanfernandino, Cornejo Ubillús pasó a formar parte del nuevo plantel docente de la renovada Facultad, asumiendo la dirección de la cátedra de Higiene y Medicina hasta que ésta se convirtió, en el año 1962, en el Departamento de Ciencias Médicas Sociales de la Facultad de San Fernando. Esta nueva estructura, ahora dirigida por Carlos Quiroz Salinas tendría una corta duración, pues en el año 1969 sería desactivada – en cumplimiento de una nueva Ley Universitaria – para ser transformada en el Departamento Académico de Salud Pública y Medicina Preventiva de la UNMSM. En 1974, tutor de la Tesis de Bachiller de Medicina de Jorge Alarcón Villaverde, titulada Medicina en el Perú (Evolución-Situación-Tendencia).

Entre los años 1962 y 1969, Cornejo Ubillús alcanzó, por concurso, el nivel de Profesor Principal y cumplió, además de sus funciones docentes en la Facultad,  otras de carácter académico. Entre las más importantes: Secretario Administrativo   de la Facultad durante la gestión del Decano Jorge Campos Rey de Castro y miembro del Primer Comité Directivo del Instituto de Medicina Tropical. Posteriormente y hasta el final de la década del setenta continuó con sus actividades docentes como   profesor principal del  mencionado Departamento Académico. Fue tutor de la elaboración de varias tesis para optar el grado de Bachiller de Medicina. Entre ellas, destaca la presentada en el año 1974 por el epidemiólogo Jorge Alarcón Villaverde – entonces alumno –, titulada Medicina en el Perú (Evolución-Situación-Tendencia).

Luego de su retiro voluntario de la Facultad de San Fernando, Cornejo Ubillús continuó con sus actividades docentes, en los campos de la epidemiología y la salud pública, como Profesor Invitado de las Universidades Cayetano Heredia y Federico Villarreal, así como de otras entidades públicas y privadas responsables de la formación del personal de salud.

Otras actividades en la década de los 90

Cornejo ya retirado formalmente de la función pública continuó, sin embargo, sus actividades de contribución al desarrollo de la epidemiología y la salud pública durante toda la década del noventa, ahora como consultor y asesor ad-honorem de los funcionarios de la Alta Dirección del MINSA, así como de la Gerencia del Seguro Social, algunos de los cuales habían sido, durante su formación médica, sus discípulos.

Cornejo Ubillús fue presidente de la Junta Directiva de la Asociación Médica Peruana Daniel A. Carrión (1993-1995 y 1995-1979) y miembro de la Asociación de Historia de la Medicina Peruana y Parques Conmemorativos.

Su principal aporte a la historiografía sanitaria nacional fue su obra denominada Registro biográfico-vivencial (vivigrama) de la historia de salud pública: Perú 1956-1999: entrevistas”, financiada por el Programa de Fortalecimiento de Servicios de Salud del Ministerio de Salud; en la que presenta los resultados de sus  entrevistas “vivenciales” a un total de 22 autoridades de salud (ministros y viceministros) que se sucedieron ente 1956 y1999. Posteriormente, la redacción de su esperado libro “Experiencias y reflexiones sobre la epidemiología nacional” fue truncada por su muerte el 19 de diciembre de 2017, a los 92 años de edad.

Distinciones honoríficas

En las instituciones sanitarias nacionales siempre ha sido evidente un agradecido reconocimiento de los aportes pioneros, en el campo de la epidemiología peruana, de los doctores Hugo Pesce Pescetto, Carlos Gayoso Pantoja, Carlos Quiroz Salinas, Hugo Lumbreras Cruz, y. Joaquín Cornejo Ubillús que con sus estudios y sus prácticas docentes han contribuido al control y prevención de las enfermedades en el país. Por ello, no puede sorprender las numerosas distinciones y homenajes que estos personajes han recibido y siguen recibiendo de parte de esas instituciones. En el caso de Cornejo solo mencionaremos algunos de esas distinciones: la Condecoración Gran Cruz de la Orden Hipólito Unanue, así como las otorgadas por el Consejo Regional III-Lima del CMP, el Consejo Nacional del CMP, la Academia Peruana de Salud, la Asociación Médica Daniel A. Carrión, la Sociedad Peruana de Epidemiología y nuestra Asociación de Historia de la Medicina. .